El objetivo del testeo de producto está destinado a conocer cuáles son las percepciones de los consumidores respecto a un determinado producto.
El testeo de producto es una metodología de estudios de mercado, que tiene como propósito conocer cuáles son las preferencias y las percepciones del público objetivo o segmento de un determinado producto.
Se puede realizar mediante distintas estrategias, hace poco se conoció una campaña publicitaria de un popular pisco chileno, el cual se llevó todas las miradas en redes sociales, gracias a la creatividad del proceso y los resultados de este.
En este contexto, Carlos Grillo, experto en desarrollo de productos, y Gerente General de CORPA Market Intelligence, indicó que, “el testeo de productos funciona mediante la realización de una encuesta a una persona que forma parte del segmento objetivo, donde un producto se testea de manera blind (“a ciegas”), en la cual no se ve ni la marca ni el empaque del producto. Se le hacen preguntas con respuestas espontáneas, así como también preguntas cerradas sobre atributos o aspectos específicos del producto evaluado. Esto a modo de recolectar información útil para la toma de decisiones respecto del producto”.
Lo anterior permite tomar decisiones respecto al lanzamiento de un producto en particular, cambiar la fórmula o receta, conocer en profundidad los gustos de los consumidores, ver oportunidades de mercado o compararse con la competencia.
¿Cómo se realiza el testeo de producto?
El testeo está enfocado al público objetivo, este es determinado por la marca. “La selección de muestra dependerá de la forma de medición, puede ser aleatoria entre transeúntes, en hogares, etc.”, señala Grillo.
Pero eso no es todo, porque llevar a cabo el proceso de testeo es primordial según el experto, sobre todo en lo que corresponde a consumos masivos, “no se recomienda, lanzar un nuevo producto sin testearlo o hacer cambios a uno sin probarlo antes, puede hacer que sea un completo fracaso y ocasionar millonarias pérdidas”.
Nuevas tendencias y legislación
Chile fue pionero en Latinoamérica en la ley de etiquetado de alimentos, y eso “fue todo un desafío” recuerda Pavel Castillo, Gerente de Intelligence de CORPA, “tuvimos que realizar cientos de estudios buscando nuevas fórmulas que le dieran la posibilidad a las empresas de ajustarse a la nueva legislación y que fueran preferidas por los consumidores.”
Castillo asegura que en consumo masivo “nada es al azar” e indica que las personas y sociedades van cambiando sus gustos y preferencias a las cuales las empresas deben adaptarse, como por ejemplo la irrupción del vegetarianismo o veganismo.
Un buen testeo tiene buenos resultados
El proceso recomendado inicia con el establecimiento de un público objetivo del producto, en donde se identifican las necesidades y lo que se debe evaluar finalmente. Luego, se establece con qué parámetros se deben tomar tales decisiones para así crear un proceso de testeo de producto efectivo que responda a las necesidades particulares del cliente.
“Si un producto es lanzado al mercado y no se vende, tendremos una merma de toda la producción, un Blind Product Test, ayuda a que el producto tenga mayor éxito y no se desperdicie”, dice Castillo.
Cabe destacar, que el experto de CORPA es enfático en que los productos de consumo masivo, en general, todos los que están a la venta en un supermercado, deben ser probados con anterioridad.
Finalmente, el testeo puede generar resultados que sirvan para llevar a cabo innovaciones en el producto, hacer cambios de fórmula o compararse con su competencia. Por otro lado, puede indicar si un producto nuevo debe ser lanzado o no al mercado.
“Los resultados ofrecen información útil para saber si un producto cumple con las expectativas de su público objetivo e identificar aspectos a mejorar para lograr un producto exitoso”, indica Grillo.
El testeo de producto se puede realizar en cualquier momento, la recomendación de Pavel Castillo es que el proceso inicie con este, antes de lanzar el producto, luego llevarlo a cabo también cuando ya está introducido en el mercado, se le quieran incorporar cambios de formulación o una nueva línea de productos.
Al mismo tiempo, se recomienda hacer testeos cuando se desea innovar en algún aspecto del producto, reducir costos o adaptar el producto a las necesidades del consumidor, lanzar nuevos productos, entre otros.